Que está Pensando Cocina Nativa?

Banquetes & Recepciones 

 

Momentos inolvidables de nuestros corazones, guardados en la bóveda de nuestra memoria por siempre,  sacrificadas horas de trabajo planificadas meticulosamente y organizadas de tal forma que nada se escape a lo que nuestros comensales han soñado para hacer un día especial y lleno de júbilo.

Nada se compara con la alegría de ver un evento satisfecho, donde cada una de las expectativa de nuestro cliente o invitado se ha cumplido, podemos ver el brillo en los ojos de las personas que cumplen su sueño viendo cada detalle logrado.

Días enteros previos a la celebración son intensos y llenos de presión donde nosotros los cocineros sacrificamos horas y horas de pie haciendo que los productos se vayan transformando desde lo más simple hasta lo más complejo llenos de pasión y de trabajo nos convertimos en esclavos de nuestra pasión.

La Cocina, divino Don que nos da la posibilidad de crear y satisfacer con nuestras manos y nuestro gusto a muchos, propios y extraños.

Cuando el día se aproxima y las horas son ya definidas en contratos, estas vuelan de tal manera que empieza nuestra jornada y si no hemos organizado todo,  el tiempo pasa tan rápido que en cuestión de minutos los invitados ya han llegado y empezamos a ver un desfile de gente llenos de expectativas y ganas de pasar un momento inolvidable, de nuestro lado mientras todo ésto pasa nos preparamos con cronómetros y tiempos exactos para salsear y  poner a punto en hornos los productos y sacar todo a la minuta, eso nos da un efecto de satisfacción inigualable que logra sacar una sonrisa a quién nos a contratado y vemos como descansa de toda la presión de lo más importante en un banquete o recepción, La deliciosa comida que es Nuestra Pasión.

Si hacemos memoria cuantas personas hemos atendido serían  números exorbitantes de describir, y a muchas personas les hemos hecho sentir el gusto de la buena cocina siempre será interminable, pero en ocasiones nos sentimos tan parte de un evento que inconscientemente quedamos inmortalizados en fotografías de los momentos más especiales  dentro de cada una de sus vidas. Con la satisfacción del trabajo bien hecho.